Niebla
en el puerto de Barcelona
Carlos
Poveda Barreda
...la
niebla que apareció en el mar ocultando el horizonte comenzó
a avanzar hacia la costa. Al rato vimos desaparecer las islas y
los grandes barcos que navegaban a lo lejos, más tarde dejamos
de ver los acantilados y se apagó la luz en el extremo del
faro, poco después desaparecieron los barcos que habían
demorado su salida y los edificios del puerto, después la
ciudad y finalmente nosotros. (Relato breve de Carlos Suchowolski).
El
pasado 20 de Abril de 2010 ocurrió un extraño y fantasmagórico
fenómeno atmosférico. Si, ya se que la niebla no es
un fenómeno extraño, por lo frecuente de su aparición,
pero esta niebla si que lo debía ser, por los gestos sorprendidos
y las mudas preguntas reflejadas en los rostros de las personas
que la contemplaron ese día y, posiblemente, causando temor
y angustia en muchos, quizás como un reflejo ancestral ya
que es sabido que la niebla en otras épocas era un hada muy
bella, muy noble, muy sensible que cautivó el corazón
y alma del viento para convertirse en su eterna amada en el mundo
de la luz, pero en el de las tinieblas es el fantasma de la noche,
es quien acompaña a las almas en pena, a los corazones agonizantes
de dolor y angustia...
Era
una niebla baja, que venía del mar hacia tierra, entrando
principalmente por las dos bocanas del puerto, tocando agua, que
se iba metiendo hacia las terminales portuarias, cubriéndolas
y entrando en la ciudad lentamente, imperturbable, apoderándose
de todo. A nivel de mar, testigos presenciales afirmaron que era
una niebla muy negra e inquietante, sin embargo, visto desde las
alturas, desde Montjuic, con el cielo claro y limpio, parecía
una nube que hubiera caído al mar, ya que con el brillo solar
daba la sensación de una nube al revés. La parte alta
del Hotel Vela, la torre Mapfre y el Hotel Arts estaban libres de
niebla; parecían el palo soporte de un inmenso algodón
de azúcar de las ferias.
Tengo
referencias de que el pasado mes de Noviembre, ocurrió algo
similar. También tengo una experiencia personal; hace muchos
años estando en el puerto, concretamente en el rompeolas
(restaurante Portacoeli) repentinamente llegó una niebla
que cubrió totalmente la bocana (solo había una entonces),
que paralizó totalmente el tráfico portuario, e incluso
uno de los prácticos a bordo de un buque que estaba metiendo
para atracar, se planteó fondear en medio del canal, cosa
que no llegó a hacer porque la niebla, tal como llegó,
se fue sin avisar. Quizás estos episodios de niebla no tengan
exactamente las mismas características que el que nos ocupa,
pero ilustra el hecho de que en el puerto abundan estas circunstancias
atmosféricas.
No
es la primera vez que este fenómeno ocurre, ni será
la última. Por lo tanto hemos consultado a expertos, que
nos dicen que es un fenómeno típicamente primaveral,
aunque se puede dar también, menos frecuente, en otras estaciones.
Este tipo de niebla no tiene nada que ver con la niebla de irradiación,
la del fondo de los valles, tan usual en invierno. La niebla costera
se forma por advección. Una masa de aire cálido viaja
a lomos de una ligera brisa, por encima de un colchón frío,
en este caso el agua del Mediterráneo, que apenas se encuentra
a unos 14°. El contacto de estas dos masas comporta la condensación
de la capa de aire más cercana al mar, formando este suceso.
Aquí
mostramos en sucesión cronológica, minuto a minuto,
durante aproximadamente una hora, las imágenes de la evolución
de la niebla durante este período.
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